Todos lo recordamos con una sonrisa por aquellas travesuras de navidad, cuando una numerosa y despistada familia estadounidense olvidaba a uno de sus chicos en la casa. Con el paso de los años, la adolescencia dejó atrás esa mueca infantil irresistible y su éxito se fue en picada.  

Macaulay Culkin vive en Nueva York pero se guarda en su casa en las horas del día: su libertad aparece en las noches, cuando las calles están desiertas y nadie lo reconoce. Es ese momento es cuando aprovecha para rodar los capítulos de  la serie cómica The Jim Gaffigan Show. En unos meses más, también se estrenará su primera película con un papel protagónico en más de 20 años: Adam Green's Aladdin es una adaptación independiente del clásico cuento árabe.

Desde los 14 años su 'charming' fue en descenso y el número de escándalos por drogas, detensiones por manejar borracho, excesos y escándalos familiares, en ascenso. A principios de 2000, participó en algunos films menores y sus visitas a las clínicas de desintoxicación se hicieron más frecuentes: incluso terminó su relación de 8 años con la actriz Mila Kunis, ahora casada con Ashton Kutcher.

A los 31 se lo vio físicamente muy desmejorado, aunque su acercamiento a la música lo rescató de sus adicciones. Desde 2012 se unió al grupo llamado The Pizza Underground, que versiona canciones de la banda de Lou Reed con letras ligadas a la clásica comida de origen italiano. Hay varios videos de sus actuaciones y realmente, dan pena por el poco vuelo que muestra la banda, aunque seguramente hay quienes disfruten de la presencia de Culkin y las ridículas rimas con salsa de tomate.

Su última aparición fílmica fue en un cortometraje para la serie web Dryvrs, publicado en diciembre de 2015. Ahora, en las tomas de The Jim Gaffigan Show, Macaulay se interpreta a sí mismo como una especie de reivindicación de talento personal.