El contar los detalles de su aislamiento, Guillermo Andino reconoció que tuvo miedo de morir durante su tránsito por la enfermedad y no pudo contener las lágrimas.

El hombre volvió notablemente más sensible y se quebró varias veces al contar su experiencia. Reveló que cuando era chico había sido aislado por otra enfermedad y que esto le trajo algunos recuerdos y hasta contó que soñó con su padre.