Enfrentarse a la furia de Christophe Krywonis, no fue nada fácil para Matías de Villa Crespo que no pudo presentar de manera correcta su postre de de queso y mango con chocolate que luego llamó "cheescake".

Incluso Germán Martitegui no dudó en calificarlo de "horrible" y Donato de Santis lo llamó un "chiste".

La tensión se esparció por el estudio mientras Matías era juzgado de manera para nada amable.