La noticia de que Sofía Bonelli estaría embarazada de dos meses y medio -fruto de su relación con Claudio Paul Caniggia - explotó en la revista Caras. De ahí en más, la palabra de Alexander Caniggia se volvió crucial, ya que más allá de que podría tener un hermanito en camino, respalda al cien por ciento a su madre, Mariana Nannis, en sus delicadas denuncias judiciales contra el Pájaro.

Entonces, un equipo de Los Ángeles de la Mañana fue hasta al aeropuerto de Ezeiza a hacerle una nota al mellizo de Charlotte, quien regresaba al país tras aparecer en un programa de la televisión extranjera. Escurridizo, Axel ni siquiera saludó y se apresuró para escaparse del periodista Santiago Sposato, quien intentaba que el mediático se pronuncie respecto de la versión de embarazo de la pareja de su padre.

Después de una insólita persecución a la carrera esquivando personas, un amigo de Alex comenzó a increpar y empujar al cronista en la zona del estacionamiento. En plena agresión, el muchacho exclamó: “Dejalo, loco. ¡Dejalo tranquilo!”. Entonces, en medio de esa escaramuza, Alex aprovechó para agarrarle el micrófono al periodista y tirárselo al suelo.

Alexander además manoteó la cámara, aunque esta vez no logró lanzarla al piso, al tiempo que gritó: “¡No molestés! ¡No molestés!”. Reclamo que además acompañó con fuertes empujones.

Al final, el escándalo terminó con Alex Caniggia retirándose custodiado por su amigo, luego de reiteradas agresiones físicas y verbales a los trabajadores de prensa.