En una nueva emisión de “Chango Feroz”, el segmento que conduce el intrépido Andy Chango, una vez más el conductor se aventuró a cubrir los sucesos más destacados de la semana. Estos fueron, el casamiento de Wanda Nara con Mauro Icardi, y el primer entrenamiento de la selección Argentina antes de partir hacia Brasil para disputar el Mundial.

Antes de la boda, el músico presenció el momento que la feliz pareja ingresaba al registro civil, y en medio del griterío de los paparazis y cholulos y fanáticos que se acercaron al lugar, les gritó: “Aguante el amor libre y el sexo grupal”.

En la previa, Andy pudo charla con el periodista Pablo Layús, a quién le preguntó quién era Wanda Nara, y si había “cantado en las Spice Girls”, debido al revuelo que generó a partir del casamiento, y el especialista en el rubro espectáculos, le explicó: “una vez cantó con un micrófono muy especial, y a partir de ahí saltó a la fama”.

“Es el gran mérito de Maxi, porque no le importó, y ‘la rescató del mundo de la canción’”, ironizó Layús, quien ante una nueva pregunta de Chango, sobre si la “gente consume cualquier cosa”, a raíz del profundo interés que generó la boda en el público, el periodista contestó afirmativamente.

Hasta que llegó el momento en que la jueza los declaró “marido y mujer”,  y la feliz pareja de recién casados salió del registro civil. Allí, entre arroces, Andy Chango le preguntó a los gritos a Wanda, algo que nunca respondería: “¿Qué tal los amigos de Mauro?”

Antes de cambiar de rumbo y dirigirse hacia la conferencia de prensa posterior al primer entrenamiento de la selección Argentina, el músico hizo una “parada técnica” en un bar de Palermo, donde se encontró con Rubén Rada, y juntos aprovecharon para tocar un rato a partir del “set de percusión diferente” que armó Andy, con las banquetas y otros artefactos del lugar.

Una vez en Ezeiza, previniendo lo que se podía llegar a venir, la gente de prensa de la Selección le pidió a los representantes de “Chango Feroz” que tengan cuidado con las preguntas. Andy pudo o no tener esta consideración, y les preguntó acerca de la presión antes de un partido mundialista.

“Yo a veces tengo que tocar para 200 personas y no puedo dormir; en un Mundial, ¿no tienen problemas de insomnio?”, consultó el músico en su rol de intrépido periodista, y Fernando Gago fue el encargado de responder: “jugar un Mundial genera ansiedad, pero esas cosas hay que manejarlas para tratar de llegar lo mejor posible, y hacer de esa presión algo bueno para nosotros”.