Esto es culpa de los primeros economistas que quisieron allanar el lenguaje técnico de la Economía en los medios de comunicación. A estos le siguieron los que quisieron hacerlo con tono popular y canchero, al estilo Carlos Melconian o Emanuel Alvarez Agis, pero esto ya se desmadró.

Martín Tetaz llevó al extremo esta técnica discursiva subiéndose al boom de las figuritas del Mundial, e hizo un parangón entre la escasez de dólares y su real valor, y la falta de figuritas en los kioskos.

Lo llamativo es que no solo se animó a dar ese ejemplo, sino que se mostró tan orgulloso del mismo, que lo subió a sus redes sociales.