Cada nueva medición arroja malas noticias para quienes buscan trabajo en el país. El empleo temporario, que suele usarse para predecir la expansión o contracción de la actividad formal, se redujo drásticamente en el primer trimestre de 2017. Cayó el 16,6 por ciento.

La baja no es nueva, sino que ya se registraba en 2015 y con mayor fuerza en 2016. De hecho, el primer semestre del año pasado fue sumamente recesivo, con bajas de hasta el 8,6 por ciento, indicó el diario La Nación. 

En números duros, mientras que en marzo del 2016 había 61.816 trabajadores temporarios registrados, es cifra cayó a 52.042 en el mismo mes de este año. 

La baja en el empleo temporario "viene respondiendo a la tibia actividad económica. Pero la falta de inversión a largo plazo tampoco facilita las cosas", dijo al mismo medio, José María Mariani, director ejecutivo de Faett.