Como punto de partida el ex titular del ONSRA sostiene que "habría que considerar que gran parte de los pasajes del primer trimestre de 2016 fueron vendidos durante el gobierno anterior y se ocuparon los aviones con esa herencia", mientras que en 2015 "se había registrado un crecimiento del 10,8% y del 11,8% para cada uno de los trimestres, respectivamente".

Respecto del segundo semestre se registra un estancamiento de la demanda sobretodo en abril y mayo. Esta caida en las ventas fue comparable a la "la lluvia de cenizas que provocó la erupción del volcán Puyehue (en junio de 2011)”.

El informe continúa al explicar que "el segundo trimestre encontró a los cielos argentinos con la operación de 68 rutas de cabotaje en junio de 2016 en comparación con las 77 operativas en igual mes de 2015 y una empresa menos debido a la interrupción de los servicios de Sol Líneas Aéreas”.

La causa responde directamente a la forma de gobernar de Cambiemos. Se abandonaron varios corredores por parte de Aerolíneas Argentina al considerarlos "no rentables". El detalle: muchos de las cuales fueron aprovechadas por las privadas.

En el plano internacional también se redujeron frecuencias al exterior. Pese a eso los números no son tan negativos. El primer trimestre de 2016 registró un crecimiento de 11,1 por ciento, mientras que el crecimiento en el segundo trimestre fue del 8,5 por ciento. En este segmento, Aerolíneas Argentina incrementó la demanda semestral un 15,2 por ciento en 2016, es decir 1,7 veces en relación al crecimiento que tuvo LATAM (8,9 por ciento). 

En el mercado internacional, las líneas aéreas extranjeras incrementaron su demanda en el segmento internacional en un 8,1 por ciento. A su vez, con respecto al total de rutas internacionales se registró una caída de la demanda en 16 destinos.