La macrisis se está llevando puesta la calidad de vida de los argentinos: casi la mitad asegura haber reducido el consumo de carne y el 35 por ciento dice consumir menos lácteos. Ni el religioso asado dominguero nos queda como consuelo al pesar de los días hábiles…

Los datos son revelados por 'BAE Negocios' sobre la base de un informe del CEPA y del Instituto Proyección Ciudadana, que también da cuenta de otras restricciones impuestas por la crítica realidad socioeconómica: el 63 por ciento de las personas dice haber restringido sus gastos en salidas y el 44 por ciento afirmó comprar menos bebidas.

Obviamente, el sector de menores ingresos es el más afectado por las políticas macristas: el 64 por ciento de los más pobres dijeron haber consumido menos carne, el 44 por ciento menos lácteos y el 55 por ciento menos bebidas.