Cuando a los once minutos Leo Messi definió con un zurdazo bajo parecía que encaminaba a un triunfo fácil en casa. Más aun cuando el gol en contra de Jaouen Hadjam aumentaba la diferencia.

Pero otra vez al equipo parisino le aparecieron sobras en defensa y en un abrir y cerrar de ojos le empataron el encuentro-

Pero en la segunda parte, de la mano de un intratable Mbappé y con Leo de organizador, se llevó el partido.