¿Si el juez Manuel De Campos no hubiera sido apartado de su investigación de la barra de Boca, hubieran ocurrido los vergonzosos y repudiables sucesos conocidos por todo el mundo? Esa es la pregunta que nos hacemos a una semana del escándalo que derivo con la descalificación de Boca de la Copa Libertadores, seguida de una sanción de AFA.

La duda nunca la podremos resolver gracias a la sugestiva decisión tomada por la Cámara de Apelaciones porteña apenas una semana antes de que el conjunto 'xeneize' y River disputen una seguidilla de tres 'Superclásicos', dos de ellos en La Bombonera.

La decisión de apartar al juez tomó por sorpresa al propio magistrado y causó además preocupación y malestar en las altas esferas del Ministerio de Seguridad de la Nación y de la Policía Federal. Claro, todos eran conscientes de las consecuncias que podía tener (y finalmente tuvo) el polémico fallo.

De Campos contaba incluso con el aval de dos magistrados que, al momento de la resolución de la Cámara, estaban ausentes.

Pero lo hecho, hecho está. Es así, que esta mañana Mauro Szeta desenmascaró a Angelici y toda la cúpula dirigencial de Boca Juniors por su llamativo cambio absoluto en su consideración del trabajo y la credibilidad del juez De Campos. El periodista lo dejó claro en una breve y contundente explicación.