Messi se llevó un rasguño de una fanática, que lo interceptó en el ingreso del plantel al hotel Park Hyatt de Chicago, Estados Unidos, luego del entrenamiento matutino en el que as de espadas de Martino hizo trabajos físicos exigentes.

Messi, distendido, con sus botines en la mano izquierda y detrás del delantero Sergio Agüero, descendió del micro que transportó al plantel desde la Universidad de Illinois y en pocos segundos sintió el pedido desesperado de una fanática decidida a tener su autógrafo.

El crack rosarino fue llevado de inmediato por algunos integrantes de la delegación argentina mientras contempló la situación un tanto sorprendido y sin reacción. 

Palabra de mujer

La mujer es mexicana -se llama Norma Briceño-, y rompió en llanto luego del incidente que generó la acción de los policías de Chicago, quienes la sujetaron para alejarla del ídolo.

“Quería un autógrafo para mis hijos. Amamos a Messi y yo lo tenía amarrado con mi mano cuando vino la seguridad, me arrastraron y lamentablemente lo rasguñé. Me querían arrestar”, relató Briceño con lágrimas en los ojos y una figurita del crack rosarino de la edición anterior de la Copa América en sus manos.

Briceño, aun dolorida por la fuerza policial, pretendía una firma de Messi en la figurita para su hijo Karlo, el nombre que escribió en su mano derecha para que el capitán del seleccionado argentino de fútbol efectuase una dedicatoria.

“Te pido perdón Lionel Messi, no quise lastimarte”, fue el lamento, con más lágrimas, de Briceño, con musculosa rosa y pantalón de gimnasia negro, frente a una cámara de televisión panameña.