En el fútbol sudamericano estaos acostumbrados, no nos llama la atención. Pero para Ronald Koeman la forma en que los defensores del Getafe trataron a sus jugadores debió ser penada por el árbitro.

Si bien fueron faltas fuertes, tuvieron su correspondiente tarjeta amarilla, y sólo se puede objetar que no haya habido expulsión de Diop tras el codazo a Messi, que el árbitro no observó.

Pero con el resultado sellado en su contra, los reclamos del holandés sonaron más a excusa que a otra cosa.