Gamba Osaka, como campeón de la Copa J-League que se disputa anualmente en el fútbol de Japón, será el adversario de River en la Final de la Suruga Bank, un certamen organizado en conjunto por la Conmebol y la Federación nipona, aunque carece de validez oficial por parte de la FIFA.

Después de obtener la tercera Copa Libertadores y emprender una extensa travesía por los aires, el conjunto de Marcelo Gallardo se presentará el martes desde las 7 en el Osaka Expo '70 Stadium, propiedad del local.

Fundado en 1980 a través de la inversión de los dueños de la multinacional Panasonic (de hecho comenzó a competir en aquella época bajo la denominación Panasonic Gamba Osaka), se convirtió en uno de los clubes fundadores de la J-League Division 1 de su país a principios de los '90 y aunque comenzó peleando sistemáticamente por la permanencia, amplió su poderío doméstico en los años más recientes.

Con un palmarés de 11 vueltas olímpicas en torneos nacionales y un lauro internacional (Liga de Campeones de la AFC en 2008), tuvo el honor de protagonizar la primera edición de la Suruga Bank en dicho año, perdiendo 1-0 ante Arsenal de Sarandí.

El conjunto nipón contará con el apoyo de una hinchada apasionada, que seguramente colmará la capacidad destinada para 21.000 personas (los precios de las entradas oscilan entre los 17 y 40 dólares).

El club, que aportó dos futbolistas propios (Yasuhito Endo, generalmente el capitán, y el defensor Yasuyuki Konno) a la selección para el Mundial de Brasil 2014, recibe el aliento de sus espectadores con la melodía de la marcha peronista y además tiene una filial en Argentina, creada por cinco fanáticos que se conocieron y se juntan cada fin de semana a observar los partidos.

Gamba Osaka perseguirá hasta fin de año el desafío de estipular un reencuentro con River en el Mundial de Clubes. Las vías de ingreso a la cita que se jugará entre el 10 y 20 de diciembre son dos: ganar la Liga de Campeones de Asia (está en Cuartos de Final, instancia en la que enfrentará al Jeonbuk de Corea del Sur) o la Liga, debido a que el campeón del país anfitrión recibe el séptimo boleto de invitación al evento más importante de clubes.

El equipo oriundo de la ciudad de Suita supedita sus expectativas a una estructura consolidada con el correr de los encuentros, pero estrictamente a las destacadas cualidades de Takashi Usami, un joven de 23 años que se desempeña en el frente de ataque y es considerado una de las máximas esperanzas del fútbol de Japón. Habitualmente viste la camiseta 39 y cosecha elogios con su virtuosa pegada.

A 18 años de su última vez en Japón (en 1997 cayó en la Recopa con Vélez en Kobe), las obligaciones recaerán sobre River, que buscará imitar la gesta de 1986, cuando venció al Steaua Bucarest por la Intercontinental, y recomponer la herida de 1996, cuando Juventus lo derrotó por la mínima diferencia.

De la mano de Gallardo, River sueña con volver a consolidarse en el ámbito internacional. ¿Podrá?.