La noticia genera confusión en el verano 2015 y en la pretemporada de Tandil. La dirigencia de Boca se desprende de sus jugadores, pero no contrata a ningunoy desata un panorama complicada para afrontar las competencias que se acercan. Ahora, quien emigra es Emanuel Insúa.

El defensor fue vendido a Udinese por alrededor de 3 millones de dólares.  De esta forma, Insúa se convierte en el séptimo futbolista de Boca que se va en el mercado.

El lateral de 23 años fue comprado por el club italiano, pero no jugará allí, ya que pasará a préstamos al Granada.

A las idas de Hernán Grana, Pablo Ledesma, Juan Forlín, Mariano Echeverría, Leonardo Suárez y Nahuel Zarate ahora se suma la del defensor.

De esta forma, ya sin Insúa, Arruabarrena solo tiene un jugador en esa posición.  Nicolás Colazo se convierte en la única opción del entrenador en sector izquierdo de la defensa.