Quedaban pocos segundos y Argentina estaba obligado a sumar de a tres para forzar al menos un tiempo suplementario con Brasil que pueda modificar el transcurso del reglamentario.

Andrés Nocioni, la gran figura del choque, tomó la pelota desde el perfil izquierdo del campo y sacó un bombazo de tres que se metió con suspenso. El balón rozó el aro, amagó con salir, pero finalmente le hizo un guiño al equipo argentino y traspasó la red. El cuarto final cerró con un 85-85 gracias a la intervención del alero.