El ex Real Madrid que integró el célebre equipo de Los Fantásticos, ya tiene 45 años. Eso no le impide jugar al teqball -juego que se ha impuesto entre los futboleros-, y hacerlo con habilidad.

A sus redes sociales subió un punto que le ganó a su hijo Romeo, aunque algunos objetan que no está permitido subirse a la mesa, una de las modalidades que algunos emplean.