Franco Vázquez, autor de uno de los dos goles con los que Sevilla se metió en la final de la Copa del Rey, tiró este maravilloso caño durante las semifinales en la que los andaluces vencieron 2-0 a Leganés.


Nótese la reacción de la platea sevillista, que se pone de pie para aplaudir no solo el 'chiche' sino también la manera en que luego el zurdo cubre la pelota hasta generar la falta del rival.