Wei se perderá al menos cuatro partidos de la Superliga china y dos partidos de la Liga de Campeones asiática. Pero ahí no termina el asunto. 

Según la prensa china, el Guangzhou Evergrande considerará despedir al jugador de manera permanente después de su suspensión.

La acción en cuestión se produjo en un partido de la Copa de China contra Uzbekistán, cuando Wei le cometió una fuerte infracción desde atrás a Otabek Shukurov, quien sufrió la fractura de tibia, siendo sólo amonestado por la falta.

Tras el partido, Shihao visitó el hotel del equipo de Uzbekistán y se disculpó con Shukurov, ante quien aseguró que no esperaba que la entrada "pudiera causar una lesión tan grave". No obstante, su club consideró que las disculpas no fueron suficientes y que el castigo debe ser más severo.

Así, en un comunicado, señaló que Wei "debería reflexionar profundamente sobre sus acciones" y explicó que estudiará despedir al futbolista, quien se unió al Evergrande a principios de este año procedente del Beijing Guoan.