El grupo Clarín conoce el negocio del Fútbol, por eso acaparar los clásicos más importantes en audiencia ya no le alcanza. El Grupo le exigirá al nuevo gobierno la cancelación de la transmisión de los partidos en directo vía web, siendo así los únicos emisores de la señal.

Según confiaron fuentes al diario El Cronista: "Sólo podrían tomar las imágenes cuando termina, lo que significa que perderían la principal fuente de visitantes que tiene la web y recién podrían trabajar con el material audiovisual una vez que concluyó el encuentro".

En la era digital la facilidad de acceder a contenidos es casi infinita, a no ser que un Grupo empresarial disponga la exclusividad de los mismos, confinando así a quienes accedían a este servicio desde el interior o exterior del país, a tener que pagar por el servicio de cable o esperar a verlo en algún resumen.

¿Volveremos a los bares para ver el fútbol?