La primera imagen de Mauro Icardi en la selección argentina en el campo de Melbourne City Academy provocó extrañas sensaciones, ya que se lo vio entrenando distanciado de sus compañeros, acrecentando la teoría de que nadie lo quiere. Sin embargo, esto se debió simplemente a una distensión muscular, por lo que no se sabe si será titular en el partido del viernes ante Brasil.

El delantero se bajó del avión en el aeropuerto de Tullamarine y lo primero que hizo fue sumarse a la ronda de mates de sus compañeros. Una vez en el campo de entrenamiento, Icardi realizó ejercicios junto al kinesiólogo Luis García, mientras los demás hacían el calentamiento con pelota junto a Jorge Sampaoli. Esto se debe a la misma razón que lo marginó de las últimas fechas en la liga italiana: una distensión muscular en el recto femoral del muslo izquierdo.

Icardi llegó la mañana del lunes desde Europa junto a Papu Gómez, Éver Banega, Joaquín Correa, Federico Fazio, Gerónimo Rulli y Eduardo Salvio. Al mediodía, mientras el plantel terminaba de almorzar, se sumó Lionel Messi, que arribó en un vuelo privado desde China. En la noche del domingo ya habían desembarcado Sergio Romero y Manuel Lanzini -otro de los nuevos-. De esta manera, para completar la lista de los 26 jugadores solo faltan Gonzalo Higuaín, Paulo Dybala -jugaron el sábado la final de la Champions- y los seis jugadores del medio argentino: Jonatan Maidana, Ignacio Fernández, Lucas Alario, Nicolás Tagliafico, Marcos Acuña y José Luis Gómez.

Aun no se sabe si el centroatacante del Inter, a quien el nuevo entrenador lo considera igual de importante que Higuaín, estará en condiciones de ser titular. De momento habrá que esperar cuál es su evolución dentro de estos próximos cuatro días, y si tendrá su tan esperada chance con la selección.