Conocida como "el valle de los sueños", Kalachi es una pequeña población de Kazajistán en la que uno de cada diez habitantes sufre de narcolepsia, lo que provoca que se desmayen inesperadamente y duerman durante días.

Los científicos de varias especialidades estudiaron durante años los casos recurrentes de sueño intempestivo, como el de 20 personas que se desmayaron y durmieron durante varios días y el de 60 aldeanos que se durmieron a la vez en 2013, sufriendo alucinaciones, pérdida de memoria, mareos y náuseas.

Finalmente, especialistas de la República Checa y de Rusia concluyeron que el monóxido de carbono es el causante de la extraña epidemia que azota la aldea: cuando suben sus niveles en ese valle, bajan los de oxígeno en el aire que respiran los habitantes de Karachi, lo que les provoca la narcoloepsia.

Pero, ¿de dónde proviene ese monóxido de carbono y ese hidrocarbono que causa el serio inconveniente? De una vieja mina de uranio abandonada desde hace décadas, que está en las inmediaciones del pueblo.

¿La solución? Ninguna: también se determinó que la medida a tomar para terminar con la extraña epidemia es directamente el éxodo. En efecto, el gobierno kazajo resolvió evacuar a todos los habitantes de Kalachi, un total de 223 familias que también serán indemnizados por los daños sufridos.