El mensaje de este hombre, un respetado juez estadounidense cuya identidad permanece reservada, se hizo mega viral en las redes sociales.

Tengo dos hijos de 42 y 40 años, buenos para nada. Hasta el día de hoy los ayudo”, expresó angustiado al contar su historia tras 51 años de matrimonio.

El hombre manifestó que a través de un análisis médico para donar un riñón a su hermano se enteró de que sus dos hijos no son de él.

“No son mis hijos, son de otro. Lo único bueno es que se que no fue mi culpa, no fui quien puso a dos idiotas en este mundo”, expresó.

Luego comentó: "Yo creí que habían salido de su madre, pero salieron del plomero, del lechero. Voy a ir a casa, empezaré los papeles del divorcio, a ver si me puedo librar de esa loca”.