El fotógrafo Wolfie Van Eck, de 36 años, visitó el Parque Nacional Kruger, en Sudáfrica, donde captó unas fantásticas imágenes de la vida salvaje. Allí se puede ver a un leopardo que se arrepiente de haber atacado a un puercoespín, ya que este posee unas filosas púas que impiden que el felino se acerque lo suficiente.