A través de un mensaje claro y contundente con un "hombre imaginario" se pone de relieve la conciencia racista de la sociedad australiana en lo que respecta a su relación con los miembros y descendientes de los aborígenes locales.

El spot de la ONG Beyond Blue busca poner de relieve como  muchas personas que probablemente no se consideran racistas tienen pequeñas actitudes de discriminación en su vida cotidiana.

Si bien en este caso las víctimas son los indígenas australianos, el racismo funciona de la misma manera en otras partes del mundo, ejercido por otras poblaciones, y sufrido por todo tipo de inmigrantes y  minorías étnicas o socioeconómicas.

"La discriminación produce depresión y preocupación entre los indígenas australianos. Nadie debería sufrir que lo hagan sentir como una basura sólo por ser lo que es", deja como mensaje final el spot cuyo hashtag es #StopThinkRespect (pará, pensá y respetá).