Rakan Qteishat, de 24 años, apodado “Aquaman” por los medios de comunicación locales, arriesgó su vida para salvar la de seis nenes que estaban atrapados en una casa inundada en la capital de Jordania, Amán.

Después de varios intentos el joven logró romper las rejas de la venta con un martillo y los chicos salieron inmediatamente despedidos.