Se trata de un muchacho oriundo de Mendoza, quien se fue de vacaciones con amigos y sufrió también una agresión por parte de un grupo de rugbiers. 

Cuando el video se viralizó en las redes, los supuestos atacantes cerraron sus cuentas. 

El padre del joven expresó: "De qué vale denunciarlos si son hechos excarcelables y la problemática está en los hogares, la familia, la sociedad toda, es mucho más profunda".