Es una youtuber estadounidense, se llama Eugenia Cooney y pesa 27 kilos. Su cuenta en instagram tiene miles de seguidores y sus impresionantes fotos, muchísimos likes. 

Ella se niega a reconocer que tiene un grave problema de salud porque, además de que dicha enfermedad "nubla" los sentidos, sus casi 900.000 suscriptores de su canal, compuesto en gran parte por chicas de entre 12 y 21 años de edad, confunden la situación.

Su anorexia preocupa porque se convirtió, a su vez, en un modelo a seguir. Un grupo de personas anónimas promovieron una petición en el portal Change.org para solicitar el cierre temporal de su canal al considerar que sus videos inducen a padecer esta enfermedad. "Eugenia es un mal ejemplo para sus jóvenes seguidores, fans y amigos", reza la carta del portal. Los impulsores de esta iniciativa aclaran que su intención no es perjudicar a la chica, sino ayudarla. "Eugenia Cooney tiene una situación médica grave y necesita buscar ayuda", señalan.

Preocupados por la salud de la 'youtuber', muchos otros internautas promueven hashtags como #HelpEugeniaCooney o #SaveEugenia, entre otros.