Ya casi nada de lo que pueda suceder en una elección sorprende. Pero este evento es algo muy poco usual.

Un hombre decidió ir a votar con su mascota y hasta la metió en el cuarto oscuro para que lo ayudara a decidirse.

Pero su mascota no es tan habitual como un perro, un gato o un hamster, en esta oportunidad se trató de un loro que en ningún momento se bajó del hombro de su dueño.