Casi todos los consultaron le reclamaron al Presidente que no estaba siendo lo suficientemente violento. Sí, ellos quieren más sangre. No piden más trabajo, boleto estudiantil, planes sociales, ni siquiera están contra el impuesto a la ganancia. Sólo exigen ver a sus figuras políticas más odiadas, colgadas, y a buena parte de la sociedad, hundida en la pobreza.

El odio brota en sus miradas, incluso se animaron a maldecir al líder mundial de la Iglesia Católica, el Papa Francisco. El espíritu 'vigilante' estuvo presente, así como la desinformación que genera la repetición hasta el hartazgo de mensajes clarinistas, con el signo inconfundible de los televidentes que acompañan a Jorge Lanata los domingos por la noche.