Érica Zelaya, de 21 años, era madre primeriza, y tras fuertes dolores por el embarazo decidió acudir al hospital Juan Domingo Perón de Tartagal.

Según el relato de la madre de Érica, ellas solicitaron que se le realice una cesárea, pero desde el hospital se lo negaron y la beba nació sin vida. Según lo descripto por la madre el médico expresó que la beba murió por bronco aspiración, y le explicaron que tragó líquido.

El calvario para esta familia no termino ahí. Desde el hospital le entregaron el cuerpo de la beba embalado en una caja  de cartón. La madre de Érica explicó que le pidieron un cajón para la beba, pero no lograron conseguirlo.