En una nueva demostración de rechazo hacia la marihuana por parte del ferviente detractor del “charuto”, Eduardo Feinmann, el periodista esta vez contó la historia de una directora de colegio que cultivaba, y que como consecuencia de esta actividad había sido removida de su cargo en el 2008.

La noticia que indignó a Feinmann fue que “la directora marihuanera”, como la llamó el periodista, fue reincorporada a su puesto a través de un decreto del gobernador de la provincia de Chubut.

“Imagínese a la directora fumada, delante de los alumnos”, enfureció Eduardo, y explicó su irritación: “Ahora la vuelven a incorporar para que sea docente, y siga fumada”.