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Estrellas del polo denunciadas por evasión en la exportación de caballos
Son doce empresas y una treintena de particulares, quines están sospechados de contrabando, subfacturación y triangulación, y evasión fiscal del impuesto a las Ganancias en la exportación de caballos de polo.
Se trata de presuntas maniobras de evasión en la exportación de caballos de polo, por un millón y medio de dólares.
Según informaron fuentes judiciales, se trata de denuncias por contrabando documentado; subfacturación y triangulación, y evasión fiscal del impuesto a las ganancias en la exportación de caballos de polo.
La investigación se encuentra en la Fiscalía Penal Económica a cargo de Miguel Schamun, del Juzgado Penal Económico, a cargo de Rafael Caputo.
La investigación se generó por un alerta sistémica de la Aduana por una exportación del caballo “Gurí Patagonia” que se pretendía vender a un valor irrisorio, cuando el animal había participado al menos en un torneo de la triple corona de polo entre 2012 y 2013, lo que indicaría que fue utilizado en competencias de alto rendimiento.
Según lo precisado por las fuentes judiciales, se pretendía exportar caballos de polo como de baja categoría documentándose sus valores a U$S 5 mil como máximo.
Además se triangulaban las exportaciones, es decir, se facturaba a un paraíso fiscal pero el caballo se enviaba a otro país.

Se trata de presuntas maniobras de evasión en la exportación de caballos de polo, por un millón y medio de dólares.

Según informaron fuentes judiciales, se trata de denuncias por contrabando documentado; subfacturación y triangulación, y evasión fiscal del impuesto a las ganancias en la exportación de caballos de polo.

La investigación se encuentra en la Fiscalía Penal Económica a cargo de Miguel Schamun, del Juzgado Penal Económico, a cargo de Rafael Caputo.

La investigación se generó por un alerta sistémica de la Aduana por una exportación del caballo “Gurí Patagonia” que se pretendía vender a un valor irrisorio, cuando el animal había participado al menos en un torneo de la triple corona de polo entre 2012 y 2013, lo que indicaría que fue utilizado en competencias de alto rendimiento.

Según lo precisado por las fuentes judiciales, se pretendía exportar caballos de polo como de baja categoría documentándose sus valores a U$S 5 mil como máximo.

Además se triangulaban las exportaciones, es decir, se facturaba a un paraíso fiscal pero el caballo se enviaba a otro país.