La principal hipótesis de los investigadores es que el joven cayó al río luego de haber sido sacado violentamente del boliche.

Lo buscaron durante dos días hasta que el cuerpo apareció flotando en el río Paraná. Se investiga si el forcejeo tuvo relación directa con la muerte de Carlos Orellano.

Los familiares, que de reconocer el cuerpo, dijeron que no creen que Orellano haya sufrido un accidente y sostienen que su caída al agua fue un hecho forzado por lo que culpan a un grupo de patovicas que echó al joven del local nocturno a los golpes.

Orellano había ido a bailar el domingo por la noche al boliche Ming House River de la Estación Fluvial, en la costa rosarina. Sus amigos subieron a redes sociales fotos de aquella noche. Una de las imágenes permite saber que el joven estuvo allí al menos hasta las 4.30. Lo que sucedió después es un misterio. Sus amigos lo perdieron de vista y desde entonces lo estaban buscando.

El padre de Orellano declaró: “Me siento como un padre al que le arrebataron a un hijo por una pulsera. Su delito fue haber entrado al VIP sin la pulsera. Ahí empieza todo, en vez de pedirle que se retire lo empujaron de arriba, le golpean la cara contra el piso, él se enoja y ahí lo ‘amansan’ y lo sacan a las trompadas desde el boliche para acá".

Y agregó: "En un momento lo meten en este embudo, en vez de sacarlo para avenida Belgrano, y ante el temor de que le peguen más, cuando llegan lo aprietan contra la baranda y pasa para el otro lado. Ahí no se sabe si se resbala y se cae, si lo empujan o si le pegan una trompada y cae desmayado al agua”.

La investigación del caso está en manos del fiscal de Homicidios Dolosos Patricio Saldutti. La derivó de su par de Homicidios Culposos Valeria Piazza Iglesias, quien en medio de la búsqueda ya había ordenado el peritaje de cámaras de la zona, además de la lista de empleados del boliche y el listado de llamados al 911 y a la central de Prefectura.