El informe de CN23 advierte en la voz de varios especialistas, los peligros que representa este defectuoso sistema electoral y refleja que el Gobierno persigue un negocio millonario, con un objetivo que está lejos de buscar un mejoramiento para la ciudadanía al momento de sufragiar.

Entre las características que lo vuelven poco confiable podemos enumerar la inexistencia de un plan B -en el caso de fallas, apagones o errores en la programación- la facilidad para hackers informáticos de duplicar votos y la exclusión para la parte del pueblo que no posee conocimientos o familiaridad con los sistemas digitales.