La industria editorial está en crisis: las ventas de libros cayeron un 12% de enero a octubre de este año, poniendo al 2018 como el peor de los últimos tiempos.

El dato surge de un informe de la Cámara Argentina del Libro (CAL), en el que revela que por tercer año consecutivo se registra una retracción en las ventas acumulada de 35%. 

La mala situación comercial tiene un correlato en la producción de ejemplares del Sector Editorial Comercial (SEC) que, desde 2016, no deja de menguar. El trabajo indica que entre enero y octubre se produjeron 23 mil nuevas publicaciones, proyectándose una baja del 8% respecto a 2017 y casi la mitad de la producción de 2015. Esta caída se hace más pronunciada al analizar la cantidad de ejemplares lanzados, casi un 20% menos que el año pasado, con 51.3 millones en 2017 a un proyectado de 42 millones para el 2018. 

Según publicó el diario La Nación, un relevamiento del estado de las librerías en el país refleja que desde 2016 a la actualidad 35 pequeñas librerías debieron cerrar y otras 30 bajaron las persianas de sucursales o fueron absorbidas por cadenas o debieron reducir sus espacios debido al aumento de costos de alquiler y servicios de agua y luz.

Por otro lado, la crisis empieza a golpear en los puestos de trabajo: en dos años, el empleo directo en el sector se redujo en un 20%; mientras que el indirecto, que engloba la tarea de traductores, correctores, diseñadores y otros agentes que intervienen en la producción del libro, cayó un 15%. En tanto, en las librerías, el personal se redujo en otro 15% desde 2016.

En tanto, la Federación Argentina de la Industria Gráfica y Afines (Faiga) determinó a su vez que entre 2016 y 2018 se perdieron más de cinco mil puestos de trabajo en la industria gráfica.