Tras la caída del consumo en sus supermercados y el aumento de los costos, Carrefour presentó un proceso preventivo de crisis ante el Ministerio de Trabajo. La firma francesa tiene en el país más de 19.000 empleados.

"Carrefour Argentina presentó un Proceso Preventivo de Crisis ante el Ministerio de Trabajo, con el objetivo de encontrar soluciones para garantizar la sustentabilidad de sus operaciones en la Argentina", afirmó la compañía en un comunicado.

"La empresa está atravesando una situación económica compleja tras tres años de pérdidas. La apertura de este diálogo, junto al Sindicato de Empleados de Comercio y el Gobierno, le permitirá plantear un plan para reimpulsar su crecimiento", dijo, y concluyó: "Carrefour confía en encontrar rápidamente las soluciones necesarias, junto a las partes involucradas, y reagrupar los esfuerzos para mejorar día a día su relación con los clientes".

Desde el Gobierno, dijeron que se trata de un problema de aumentos de costos por "los altos precios de los alquileres" de los locales de la compañía, pero desde la empresa sostienen que "la caída del consumo masivo no ayudó".

Si bien desde la compañía no hicieron más declaraciones que el comunicado mencionado, la medida administrativa presentada ante la cartera de Trabajo se infiere que, al menos, podría despedir a 1.000 trabajadores de los entre 18.000 y 20.000 que tiene la a nivel local. 

Según al Ley de Empleo (Nº 24.013, el Proceso Preventivo de Crisis (PPCE) se aplica cuando se afecte a más del 15% de los trabajadores en empresas de menos de 400 trabajadores; a más del 10% en empresas de entre 400 y 1.000 trabajadores; y a más del 5% en empresas de más de 1.000 trabajadores. Este último es el caso de la cadena francesa