Fernando Pereriras falleció en la madrugada de este viernes luego de haber estado varios días en coma tras la agresión del padre de un adolescente que jugaba al futsal.

Fernando quería entrenar a su equipo y enseñarle valores. Pero quiso detener una pelea, común en cualquier partido y fue atacada a traición por el padre de uno de los chicos. El victimario sigue prófugo.