El río Uruguay presenta excesos de metales, aceites, excremento y plaguicidas, según el último estudio realizado por la Comisión Administradora del Río Uruguay, que tiene como fin monitorear ese importante curso de agua, sobre todo tras la polémica desatada por la instalación de las pasteras en territorio oriental.

De acuerdo a dicho informe, el curso de agua compartido entre la Argentina y Uruguay presenta "valores superiores a los límites establecidos de concentración" de trece parámetros, entre los que se encuentran numerosos metales, aceites, grasas, bacterias de excrementos y plaguicidas.

Metales como plomo, cobre, cromo, manganeso y clordano se presentaron en exceso en las aguas, mientas que el hierro, los aceites y grasas y las sustancias fenólicas totales "exceden sistemáticamente los niveles" permitidos.

Respecto a los restos de materia fecal, la cantidad de Enterococos, Coliformes fecales y Escherichia coli superaban también lo permitido "en la entrada al tramo compartido y en todo el tramo medio desde Puerto Yeruá hasta Punta Las Rosas", según el reporte.

Además, la CARU destacó que "el mayor riesgo identificado para la biota fueron las concentraciones halladas de plaguicidas que alcanzan a superar los niveles de toxicidad aguda y crónica" reportados para diversos organismos. Se trata de compuestos como Cialotrina, Deltametrina, Bifentrina, Cipermetrina, Fenvalerato, Endosulfan, Permetrina, Malation, Triflumuron y Clorpirifos.

El análisis determinó que el río desde aguas arriba posee altas concentraciones de hierro, aluminio, turbidez y nitrógeno Kjeldhal; mientras que hacia aguas abajo son características la alta conductividad, la demanda de oxígeno, sólidos y fósforo.