"Estamos convencidas, a diferencia del Gobierno nacional, de que las mujeres somos muy necesarias para construir el país que queremos. Porque cuando nosotras tenemos mayor participación y tomamos decisiones, crecen las oportunidades de desarrollo y de progreso para todos", dijo María Eugenia Vidal en su cuenta de Twitter.

El comentario viene a raíz de las críticas que los medio hegemónicos salieron a levantar contra el gobierno de Alberto Fernández por una merma en la cantidad de mujeres que integran el nuevo Gabinete. Lo cierto es que un gobierno de coalición como el Frente de Todos tiene un entramado complejo a la hora de armar la plantilla de nombres que respaldan el accionar del Ejecutivo, y que responda a muchas lógicas, que no solo pueden ser vistas desde el cupo.

De hecho, nadie lo sabe mejor que María Eugenia Vidal. La actual candidata de Diputada de Juntos, cuando le tocó gobernar la Provincia debió armar un gabinete que represente a frente de coalición entre radicales, peronismo de derecha y el PRO.

Como puede verse en la imagen, sólo una mujer integró su Gabinete provincial: la ministra de Salud Zulma Ortiz. Pero la mujer duró poco en el cargo. Y la razón de su remoción tuvo que ver (¿casualmente?) con su posición a favor del aborto legal.

En una de sus primeras acciones al frente de la cartera, la ministra intentó implementar el protocolo de interrupción de embarazo que ya estaba vigente previo a la sanción de la Ley IVE. Por lo que la Gobernadora la sacó del puesto y la reemplazó con Andrés Scarsi. Por lo que todo su Gabinete pasó a estar conformado íntegramente por varones. Y en las redes se lo recuerdan:

"Mejor que decir es hacer", reza el lema del general Juan Domingo Perón, nunca más atinado.