No hay mucho espacio en la estrecha franja que dejan los dos frentes mayoritarios. Tal vez por ahí crezca alguna propuesta disruptiva como la de Javier Milei y la novedad libertaria, pero parece difícil que cepas del peronismo logren crecer mucho más allá de los 2 o tres puntos.

Con el massismo, el sindicalismo, los gobernadores y el kirchnerismo en el Frente de Todos, y los peronistas opositores recogidos por la ambulancia de Pichetto, no quedan muchos a lo que les pueda llegar el discurso de Florencio Randazzo.

En el fragor de la campaña Randazzo decidió atacar al Gobierno y lo hizo de la forma en que lo suele hacer la oposición: pegándole a Alberto Fernández.