No es novedad que desde el macrismo se hable mal de la educación pública argentina. Ya lo había hecho Macri cuando dijo eso de “caer” en la educación pública y lo refrendó Vidal al asegurar que no abriría más universidades porque los pobres no llegaban a la universidad.

También Soledad Acuña cada vez que puede insulta a los docentes pero ahora Patricia Bullrich volvió a sumarse a esa línea de pensamiento al meterse con los institutos de formación docente y puntualmente con Baradel a quien prometió hacerle frente sin tener en cuenta que el hombre ganó por amplia mayoría las elecciones democráticas del sindicato.