Continuando con su estilo de aguijonear a los políticos con preguntas incisivas, Carlos Maslatón apuntó contra Roberto García Moritán y puso el ojo en dos aspectos: el dinero que le corresponde por participar en la campaña electoral, y la relación con los integrantes de su espacio.

Como era el representante de López Murphy en la Ciudad, García Moritán tiene con el resto de los integrantes de Republicanos Unidos el deber de darles una explicación coherente sobre la determinación que tomó, pero con el resto de los argentinos tiene la obligación de rendir cuentas sobre los movimientos de dinero público.