Quienes creían que el periodista no podía caer más bajo se vieron sorprendidos con la aseveración de que a Gutiérrez lo mataron buscando el "tesoro K", Lanata habló de los periodistas supuestamente perseguidos y hasta se atrevió a decir que su trabajo es el de chequear la información cosa que, a juzgar por la cantidad de historias falsas que publicó parece que él no hace.

Para cerrar habló de los servicios y sobre quienes violarían la ley al difundir la información obtenida a través de una fuente de la AFI. Lanata aseguró que en todo caso sería "el servicio" el que viola la ley si les cuenta algo. Pero Lanata omitió la ley de seguridad interior que prohibe hacer seguridad interna y además omitió el pequeño detalle de que, en el caso de Majul, el problema no es la información que difundió sino que utilizó recursos de la oficina de inteligencia para producir su programa.