Un grupo de mujeres, que habitaba junto a sus hijos e hijas una casa en el barrio porteño de Almagro conocida como Casa Pringles, fue desalojado por la Policía de la Ciudad que aplicó un operativo que incluyó represión contra legisladores y manifestantes y la detención de al menos seis personas.

El despliegue policial fue para dar cumplimiento a una orden de desalojo emitida por la Fiscalía Penal Contravencional y de Faltas 19 a cargo de Lorena San Marco a raíz de una denuncia de la Dirección General de Administración de Bienes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

El inmueble pertenece al Gobierno porteño, que en siete ocasiones intentó subastar, pero no logró concretar debido a la falta de ofertas, hasta que hace un año aproximadamente fue ocupado por un grupo de al menos diez mujeres que quedaron en la calle tras escapar de situaciones de violencia de género.