Se supone que Pagni  es un hombre preparado que sabe de lo que habla. Pero cada vez que recurre a estas canalladas no sólo queda como un ignorante sino que además se nota mucho que le están escribiendo un libreto.

Desde su gorilismo hasta sería entendible que critique al Gobierno, pero la verdad que comparar la restricción de que se den clases virtuales en lugar de presenciales por tan sólo dos semanas en un contexto de pandemia y con el único objetivo de intentar desminuir los contagios con una ley racista como la conocida como Ley Bantú en Sudafrica que lo que garantizaba era que los blancos y los negros tuvieran clases en lugares separados es realmente rascar el fondo de la olla.