A pesar de haber bajado su candidatura, Franco Rinaldi sigue sin hacerse cargo de sus desagradables dichos homofóbicos contra Mario Massaccesi, su intención de quemar con un lanzallamas a los habitantes de la villa 31 o el hecho de llamar “Sinagoga 12” al diario Página 12 y asegura que todo se trató de una descarnada campaña de desprestigio financiada por Martín Lousteau.

Incluso le pasó facturas a la hermana de Martín quien, a pesar de haber trabajado con el en la radio, no lo llamó para solidarizarse por esta situación.

Pero además Rinaldi fue un paso mas adelante y contó que fue el mismo Martín el que lo invitó a tomar un café, una vez pasadas las PASO para ver cómo seguían trabajando juntos después de las primarias.

Tweet de Felipe R Lahiteau🌈