Cuando Felipe Pigna empezó a analizar lo que sucede atrás de la causa que investiga el desempeño del gobierno de Mauricio Macri en las escuchas ilegales a los familiares de los 44 fallecidos en el ARA San Juan, puso el acento en una comportamiento que ya se usó anteriormente en la política argentina: la revictimización de los que son las verdaderas víctimas.

Así le quitó las especulaciones judiciales aunque deslizó que para él el exmandatario no va a terminar condenado- y apuntó a cómo se juega en el terreno de las declaraciones y los medios hegemónicos el rol de cada uno, apuntando a quitarle fuerza ala reclamo de las familias.