Miguel Osvaldo Etchecolatz, ex jefe de Investigaciones de la Policía Bonaerense durante la gestión de Ramón Camps y jefe directo de los 21 centros clandestinos de detención que funcionaron en la Provincia en los años de la dictadura, quiere volver a ser policía y pero su pedido fue oportunamente rechazado.

"En el año 2017 tomamos la decisión de exonerar a Miguel Etchecolatz. En Ministerio de Seguridad recibimos su solicitud para retornar a la Policía de la Provincia, solicitud que ya fue rechazada", aseguró el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo, a través de su cuenta de Twitter.

Etchecolatz fue condenado seis veces por robo de bebés, secuestros, torturas, asesinatos y desapariciones. Acumula perpetua sobre perpetua. Tuvo prisión domiciliaria hasta hace pocos meses, cuando se fue a vivir al bosque Peralta Ramos de Mar del Plata, aunque se la revocaron por una apelación que se sumó a las quejas de los vecinos y volvió al Penal de Ezeiza.

Ninguna de las condenas parece haberlo afectado tanto como haber sido exonerado de la Bonaerense, la fuerza desde donde ejecutó el plan del horror con mano de hierro. 

El nefasto personaje consideró que su exoneración de la fuerza "constituye una flagrante violación al derecho de defensa" y advirtió que le hará un juicio a la provincia de Buenos Aires por daños y perjuicios, "por los actos emanados del Poder Ejecutivo y sus funcionarios".

Pese a su pedido, tras enumerar 10 párrafos en contra de la medida, el ministro Ritondo le rechazó la apelación y el planteo de nulidad dejando firme la exoneración.

Fuente: Minuto uno