Mauricio Macri asumió la presidencia de la Nación procesado por una causa de escuchas telefónicas a su hermana Sandra y su cuñado.

Alberto Nisman era el fiscal de esa causa y trabajo junto con el exabogado de Franco Macri, Luis Conde, en recabar todas las pruebas que complicaban al expresidente.

Todo estaba listo para llevar adelante el juicio y condenar a Mauricio Macri pero la muerte del fiscal demoró en dos oportunidades la realización de esas audiencias y finalmente, después de 6 meses de haber asumido como presidente y manipulando su poder en la Justicia Macri fue sobreseído.